miércoles, 28 de diciembre de 2011

Tertulias


Entre las costumbres del período tardocolonial, se encuentra la de reunirse en los salones de las casas privadas, para llevar adelante las tertulias. En estos encuentros se conversaba sobre temas varios, afirmando De Privitellio que en este tipo de reuniones, participaban los más acomodados de la sociedad.
Como consecuencia de las Invasiones Inglesas y la crisis de la Corona española, conversar de política es una novedad que se incorpora en las temáticas sociales.
La fábrica de jabón que pertenecía a Juan Hipólito Vieytes y Nicolás Rodríguez Peña, se convirtió en la sede de las reuniones de aquello que desde 1809 comenzó a ser llamado "partido patriota". La jabonería estaba en Tacuarí y Venezuela, y por allí desfilaban los patriotas, tejiendo ya las redes de la futura revolución.
Otro lugar de tertulia y conspiración fue la casa de Rodríguez Peña. Pero no son éstos los únicos lugares de sociabilidad que se politizan. Otro lugar es "el café de Marco, donde se juntaban los jóvenes intelectuales, casi todos ellos alumnos del colegio San Carlos, que no por casualidad quedaba frente al café. Y señala De Privitellio: "En este lugar, que a diferencia de los anteriores era público, se fue conformando la idea de la existencia de una verdadera ''opinión pública'', otra notable novedad para la ciudad de Buenos Aires. Ciertamente, todos ellos eran partidarios de la facción más extrema de los revolucionarios, aquellos que luego serán identificados como morenistas. A Saavedra, este café le parecía tan peligroso, que luego de los acontecimientos del 5 y 6 de abril de 1811 (una movilización popular en apoyo del Presidente de la Primera Junta, y en contra de los morenistas), ordenó a Juan Bautista Bustos que lo cerrara, y se detuvo a varios de los asistentes".